A veces creamos piezas sin una finalidad en concreto, aunque siempre acabamos encontrando diferentes utilidades para ellas.
Estos vasitos los utilizamos para tomar un té verde con hierbabuena, un cortado o incluso para decorar pequeños rincones con distintos cactus. Sin olvidarnos de las más pequeñas de la casa, a las que les encanta tener un vasito solo para ellas.